6/12/22

OVNIS Y LO OCULTO


«Al igual que muchos contactados con los ovnis, Moi-ra y Ra-Ja Dove están convencidos de que la Era de Acuario está anunciando una nueva religión. Incluso la palabra religión ya no se usará. Para el quid principal de la cuestión tendrá un sentido mucho más profundo. La persona evolucionará al creer en algo para convertirse en algo. La persona sabrá lo que las religiones de la antigüedad siempre han tratado de demostrar sobre: «Quédate quieto y sabrás que yo soy Dios». 

De hecho, esta es la gran nueva religión. Todas y cada una de las personas sabrán que ellos son dios»

                                                                   Brad Steiger


El componente ufológico simula ser una representación actualizada de manifestaciones antiguas, es decir, los investigadores en ufología si hubiesen vivido en épocas anteriores estarían estudiando, casi seguro, Demonología.

Los mensajes que se aportan a los contactados son similares a la filosofía de la «New Age», y estos a su vez, a ciertos pasajes bíblicos.

Tanto el ovni como sus tripulantes tienen la capacidad de mimetizarse o mostrarse según las características (religiosas, ideológicas, tecnológicas…) del observador: apariciones de María para los católicos, demonios para ocultistas, djinns para musulmanes, artefactos tecnológicos, etc. Este factor indica que, quizás, no estemos hablado de algo material y sea un constructo creado por nosotros mismos.


A este respecto, Jhon Keel en su «Operación Caballo de Troya» nos dice:

«Los datos estadísticos que he extraído, y que he tratado de resumir brevemente aquí, indican que los platillos voladores no son máquinas estables que requieren combustible, mantenimiento y apoyo logístico. Son, con toda probabilidad, transfiguraciones de energía y no existen de la misma manera que existe este libro. No son construcciones permanentes de materia»


Los signos que se dan son similares a los estudiados en el campo parapsicológico, demonológico y espiritista. En un trabajo del ocultista Manel Seral Coca, llamado «Fenómenos Físicos», leemos estas conclusiones:

«Dado que los fenómenos son de la misma naturaleza, sólo podemos llegar a tres posibles explicaciones:

1. Todas las entidades sobrenaturales poseen los mismos poderes y los emplean adecuándolos a su particular característica y a la creencia del sujeto o sujetos.

2. Sólo existe una entidad sobrenatural que se divierte haciéndose pasar por cualquiera de las otras cuando le place. Aquí tendríamos al Diablo haciendo milagros o a la Virgen realizando posesiones diabólicas, por ejemplo.

3. La fuerza que produce los fenómenos procede de «otro lugar», adaptando su manifestación a las creencias del sujeto».


John Keel, en esta línea, también nos aporta algo más:

«La demonología no es solo una adicción al crack. Es el estudio antiguo y académico de monstruos y demonios que aparentemente han coexistido con el hombre a lo largo de la historia».

Se han escrito miles de libros sobre el tema, muchos de ellos por clérigos, científicos y académicos, y un número incontable de eventos demoníacos bien documentados están disponibles para todos los investigadores.

Las manifestaciones y ocurrencias descritas en esta literatura son similares, si no completamente idénticas, al fenómeno OVNI. Las víctimas de demonomanía (posesión) sufren los mismos síntomas médicos y emocionales que los contactados con ovnis.

… El diablo y sus demonios pueden, según la literatura, manifestarse en casi cualquier forma y pueden imitar físicamente cualquier cosa, desde ángeles hasta monstruos horribles con ojos brillantes. Objetos y entidades extrañas se materializan y se desmaterializan en estas historias, así como los ovnis y sus espléndidos ocupantes aparecen y desaparecen, caminan a través de las paredes y realizan otras hazañas sobrenaturales».


Brad Steiger en, «Revelation: The Divine Fire» habla de un aviso o señal previa que se da tanto en rituales ocultistas, parapsicológicos, psicofónicos, de calado espiritista o apariciones marianas:

«Varios reveladores y contactados con ovnis me han mencionado desde entonces que, justo antes de la aparición de un ser oían un extraño zumbido. Los testigos de fenómenos aéreos inexplicables también se han referido a un zumbido o un sonido poco antes de que el «platillo volante» apareciera sobre ellos. También me recuerda a gran parte de la actividad poltergeist, que produce una «señal» preparatoria de un zumbido, raspado o ruido sinuoso»

Stupple & McNeece, en el Simposio de MUFON de 1979, ya trató la relación de los ovnis y lo oculto.

«El estudio del culto de los platillos volantes demuestra repetidamente que son parte de un mundo más grande y oculto»

Y Trevor James en el Flying Saucer Review, vol. 8, N ° 1, también entró de pleno en el ocultismo.

«Un conocimiento práctico de las ciencias ocultas es indispensable para la investigación de ovnis»

El vínculo entre el ocultismo/ocultistas con los demonios, espíritus o muertos no es novedoso y es reconocido desde tiempos pretéritos con referencias escritas en las diferentes épocas.

El teólogo inglés G. H. Pember en su «Earth’s Earliest Ages and Their Connection with Modern Spiritualism and Theosophy» (1876), sobre ello escribió:

«El ocultista entra en comunicación inteligente con los espíritus del aire, y puede recibir cualquier conocimiento que posean, o cualquier impresión falsa que elijan impartir …los demonios parecen permitidos a hacer varias maravillas a su pedido».