28/1/23

EL SUEÑO MÁGICO



En la sabiduría chamánica, el contacto onírico consiste en comunicaciones que son recibidas desde el otro mundo siempre en relación directa con dioses, espíritus o seres no locales. Siendo estos quienes envían los conocimientos a sus aprendices en la tierra. Los relatores afirman que solo los especialistas que recibieron el don de viajar al mundo alterno, son quienes tienen mayor poder en sus técnicas de curación, adivinación y de intercesión.

Esta creencia está confirmada por medio de los mitos donde el morir y el renacer son la base primordial de su sabiduría.

Por otra parte, el conocimiento que es adquirido por medio de los estados oníricos se refiere a sueños y visiones que la persona comienza a tener a cierta edad, en los que «alguien» habla con el futuro brujo dándole consejos, recetas, oraciones, técnicas de curación o de adivinación que le ayudarán a interceder entre el mundo tangible y el mundo intangible. Cada sueño recibido es una lección y cada instrucción será ejecutada tal y como «dios» lo ha indicado. Al abordar el tema de los sueños, Jeremy Taylor subrayó que son una categoría de visiones que contienen mensajes que deben ser recibidos y reproducidos al pie de la letra, los cuales muchas veces son metáforas o símbolos que requieren de un código cultural para ser entendidos y que representan escenas de la vida futura del sujeto.

Comúnmente, los sueños son interpretados en relación con seres y las fuerzas que rigen la vida de las personas en general, así como por aquellos que cuentan con estos dones. Para ambos tipos de adquisición de dones chamánicos, son los sueños un medio muy recurrente para entablar conversación con el otro mundo, el de las deidades y el de los muertos.

En todos los sentidos, el sueño es una vía comunicativa esencial en cuanto a la relación chamán-mundo y la comunidad a su cuidado. Los mensajes o revelaciones recibidos en sueños deben ser ejecutados paso a paso.

Una vez que el chamán ha adquirido sus dones y comienza a brindar sus servicios a la comunidad, se enfrenta con diversos casos de enfermedades de etiología cultural: «aire de muerto», «susto», «enfermedad», «mal de ojo» y «brujería». A través de las prácticas de adivinación con elementos, los especialistas ayudan a prevenir el infortunio y a solucionar cualquier mal.

El mundo terrestre y visible se encuentra rodeado por el mundo alterno; las relaciones e intercambios son constantes y los chamanes se alían con santos, dioses y, dependiendo de las circunstancias, con otras entidades. Se encomiendan a ellos y a través de oraciones y de las prácticas de incubación, el chamán se comunica con el «otro mundo» para salvar, proteger y ayudar a su gente.

Los azande, distinguen entre los sueños de brujería y los sueños de oráculo aun cuando se superpongan, y, piensan que un incidente que ocurra en el futuro puede cambiar la interpretación de un sueño en el pasado. De ese modo, un tipo de sueño puede transformarse en un sueño de otro tipo. La distinción aproximada es ésta:

«Un mal sueño, es decir, una pesadilla, es habitualmente un sueño de brujería. Por otro lado, el sueño agradable es habitualmente un sueño oracular. Sin embargo, todos son en cierto sentido oraculares, porque en el mal sueño el individuo está embrujado, y probable, sea signo de alguna desgracia».

Los azande asocian la brujería con los sueños oraculares que profetizan una desgracia, siendo el sueño y la desgracia resultados sucesivos de la brujería. El sueño es una sombra que lanza la brujería antes de un acontecimiento a punto de provocarse; que, en un cierto sentido, ya se ha accionado. Aunque quien lo sueña no sepa en ese momento de qué se trata.

Los malos sueños no sólo son una prueba de brujería, sino que constituye una verdadera experiencia de ella.

En en mundo occidental, Austin Osman Spare, pintor y escritor quien fue miembro de la Golden Dawn, alumno de Aleister Crowley en la Astrum Argenteum y fundador la corriente Zos Kia Cultus, basada en la magia del caos y en la magia sexual. Además de crear el alfabeto del deseo o alfabeto mágico, a menudo, practicaba el dibujo «automático» inducido mediante trance, por el cual dibujaba seres de otros planos astrales o de consciencia.

Desde su infancia, y tras conocer a una tal Sra. Paterson, quien decía ser bruja, se inició en el modo de visualizar, evocar en sueños y evocar espíritus y elementales en el campo visible.


Fuente: Babalon (amazon - 2022)